In-D: Marilyn Manson, la última venida del Anticristo

El regreso de Marilyn Manson a los escenarios es una de esas cosas que pueden salir increíblemente bien o pésimamente mal. Después de un prolongado receso de casi cinco años alejado de los reflectores, el polémico cantante ha decidido poner fin al silencio.

“We Are Chaos” fue el último material lanzado por el artista norteamericano, mismo que pasó sin pena ni gloria. Con un Manson en plena decadencia y envuelto en escándalos por serias acusaciones por parte del movimiento “Me Too” el final parecía estar cerca.

Esta semana el lanzamiento de un nuevo sencillo y una gira mundial por parte de Manson fue anunciado con bombo y platillo. Honestamente la noticia me causó más indiferencia que interés. El panorama no resultaba muy prometedor con el antecedente de un Manson decadente, con la voz hecha añicos, con sobrepeso y toneladas de demandas por abuso sexual sobre sus hombros.

Sumado a esto el factor del cambio generacional natural dentro de la industria musical también jugaba en contra del Anticristo. Kim Drácula, cantante australiano llamado a ser el heredero de Manson, había aparecido en la escena y comenzaba a conquistar terreno ganando seguidores dentro del nicho que Marilyn Manson se había desenvuelto durante casi tres décadas. Parecía la tormenta perfecta para poner el último clavo del ataúd del intérprete de clásicos como “The Beautiful People” y “The Dope Show”.

Contra todo pronóstico el lanzamiento del nuevo sencillo, titulado “As Sick As The Secrets Within” resultó ser una joya. Es evidente que los años que pasó Manson alejado de los reflectores los aprovechó para una reconstrucción profunda de su persona. Físicamente se muestra en mejor forma que lo que habíamos visto en, probablemente, una década.

Vale la pena hacer una aclaración aquí. Decir que Marilyn Manson está “en forma” dista mucho del concepto que el grueso de la población entiende por “estar en forma”. Es un hecho que Manson no ha pisado un gimnasio ni por error, pero después de años de un preocupante sobrepeso es bueno verlo nuevamente “en forma”, es decir, tenemos de vuelta al Manson clásico: larguirucho, pálido y ligero sobre el escenario.

Vocalmente también resultó sorpresivo y gratificante escuchar a Manson en plenitud. Probablemente tuvo que pasar por alguna operación de cuerdas vocales, pues los últimos años de su carrera se había mostrado con una voz avejentada, rasposa y cansada. “As Sick As The Secrets Within” nos entrega a un Marilyn en pleno uso y control de sus facultades vocales lo cual, sinceramente, nadie esperaba.

Estamos ante el ocaso de una de las últimas grandes estrellas del rock internacional. Es la recta final de un artista que ha sabido manipular masas, poner el dedo en la llaga y ha encontrado en la música un canal de comunicación para drenar todo lo que habita en su cabeza.

Bien vale la pena esperar el lanzamiento de los próximos sencillos que darán forma al álbum completo a finales de 2024. Todo lo que sube tiene que bajar y Manson lo sabe. El hombre ha tomado la decisión de desintoxicarse de alcohol y drogas, de cuidar su peso, de refrescar su voz y terminar su carrera de una manera por demás digna. Es un hecho que esta es la última venida del Anticristo Superestrella y hay que disfrutar el último tramo de su carrera. Es un hecho, también, que nuestro 'Gober' nos dio atole con el dedo y ni de chiste podremos tenerlo en tierras potosinas. Aún así vale mucho la pena esperar que su gira mundial pise tierras mexicanas para poder verlo en vivo en alguna de las tres macro ciudades de nuestra República.

Corra y desempolve sus viejos discos de Manson, échese agua bendita y cuélguese el collar de ajos porque el Anticristo está de vuelta para dar lata un rato más. Amén.