logo pulso
PSL Logo

El aliado y rival Pagos ajenos

Por Redacción

Abril 08, 2025 03:00 a.m.

A

El gobierno gallardista ha logrado forjarse una imagen de poderío casi imbatible. Con grandes reservas de recursos políticos y económicos, la administración del PVEM ha ocupado vacíos o ha logrado arrebatárselos a sus adversarios por buenas y malas.

lll

Se ha expandido hasta hacer pensar que no habría algún contrapeso que rivalizara con su posición. Y lo han logrado, al menos en el nivel local. La oposición, anulada; los poderes Judicial y Legislativo, uno en proceso de reconfiguración y el otro sometido al 100%; los órganos autónomos, dentro de su esfera o en proceso de desaparición; y la mayoría de los organismos civiles, cooptados a punta de despensas o sin fuerza suficiente para oponerse a decisiones arbitrarias.

lll

Pero en el exterior, el gobierno gallardista se ha topado con un opositor no sólo de su estatura, sino mayor: el aliado de la 4T, el gobierno federal.

lll

El gobernador Gallardo ya sintió el frío de la distancia al quejarse de que los delegados federales, algunos incluso, que estuvieron cerca de él y de su partido, le han hecho vacío, reduciendo a cero su coordinación.

lll

En el papel, el PVEM es aliado de Morena, pero ya han sido varios los indicios de que esa cercanía es por conveniencia, y no por convicción. Y en el caso potosino, la conveniencia se va evaporando. 

lll

No se recuerda que en las administraciones pasadas, el gobernador en turno emitiera una queja tan severa de los delegados federales, ni siquiera en los casos de los priistas Fernando Silva y Fernando Toranzo, que convivieron con los gobiernos opositores panistas, encabezados por Vicente Fox y Felipe Calderón, respectivamente.

lll

Hoy no es así. Gallardo Cardona habla de falta de coordinación, de ausencia de información e incluso de un vacío institucional.

lll

Ya ni siquiera se les informa cuándo se dan los nombramientos y sobre quién recaen. 

lll

El gobernador se queja de sesgo partidista y de que vean a un gobierno que no comparte siglas como enemigo. No pasa desapercibido de que aquí ha incurrido en esas mismas prácticas, o incluso más duras, para imponer la hegemonía verde en los municipios. Estar del otro lado de la lanza no debe de ser cómodo para el gallardismo.

lll

Pero no es el único flanco de esta disputa “fraterna”. Hace unos meses, un puñado de médicos jubilados del Hospital Central protestaron por la falta de pagos, de entera responsabilidad federal. Con algunos reclamos, el gobierno estatal aceptó asumir el gasto, que no le correspondía.

lll

Ahora es el SNTE el que reclamó un pago que, también, debía asumir la Federación. Y ahora, no fueron decenas los inconformes, sino miles de maestros los que presionaban en las calles, que además, contaban con un poder que no se podía dejar de lado: la capacidad de paralizar el sistema escolar.

lll

De nueva cuenta, el gobierno estatal tuvo que doblarse y asumir una responsabilidad ajena. Pero poca utilidad tendría exhibir o molestar al gobierno federal.

lll

De cara al ocaso del sexenio, la administración estatal se topa con que el poder no es absoluto ni dura para siempre.