Kryvyi Rih llora por sus niños
La ciudad ucraniana celebra los funerales de algunos de los fallecidos por un misil ruso
Kryvyi Rih, Ucrania.- La ira y la indignación se apoderaron de la ciudad natal del presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy el lunes mientras se celebraban los funerales de algunas de las 20 personas, incluidos nueve niños, que murieron por un misil ruso que atravesó edificios de apartamentos y destruyó un parque infantil.
Más de 70 personas resultaron heridas en el ataque del viernes por la noche en Kryvyi Rih. Los niños jugaban en columpios y en un arenero en un parque arbolado en ese momento. Los cuerpos estaban esparcidos por el césped.
“No estamos pidiendo compasión”, escribió Oleksandr Vilkul, el jefe de la administración de la ciudad, en Telegram mientras Kryvyi Rih estaba de luto. “Exigimos la indignación del mundo”.
La Oficina de DH de la ONU en Ucrania dijo que fue el ataque verificado más mortífero que ha dañado a niños desde el inicio de la guerra en febrero de 2022.
Ucrania ha aceptado un alto el fuego propuesto hace semanas por Washington. Pero Rusia todavía está negociando con Estados Unidos sus términos para aceptar una tregua.
“Estamos hablando con Rusia. Nos gustaría que se detuvieran”, dijo Donald Trump a los periodistas el domingo. “No me gusta el bombardeo”.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, reafirmó el lunes que Putin apoya un alto el fuego propuesto por Donald Trump, pero quiere que se cumplan las condiciones rusas.
En Kryvyi Rih, la maestra Iryna Kholod, de 59 años, recordó a Arina y Radyslav, ambos de 7 años, muertos en el ataque del viernes, como “pequeños soles en el aula”.
Radyslav, dijo, estaba orgulloso de ser parte de una campaña escolar que recolectaba comida para mascotas para animales callejeros. “Sostenía la bolsa como si fuera un tesoro. Quería ayudar”, dijo a The Associated Press.
“Después del viernes por la noche, dos pupitres en mi aula quedaron vacíos para siempre”, dijo Kholod, agregando que todavía tiene regalos de cumpleaños sin abrir para ellos.
En Kryvyi Rih el lunes, una alerta de ataque aéreo interrumpió un memorial planeado, un recordatorio de la amenaza continua para los civiles.
La frustración golpeó a Nataliia Freylikh, la maestra de Herman Tripolets, de 9 años, quien murió. “Ni siquiera es posible llorarlo adecuadamente”, dijo Freylikh.
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